El próximo año se celebra el bicentenario de la inauguración de La Farola de Málaga. Esta Asociación ha convocado una marcha festiva para pedir a la Autoridad Portuaria de Málaga que, durante 2017, la abra a la población para que, después de 200 años, La Farola sea parte de la Cultura .
Este viernes a las nueve de la noche está prevista la inauguración de la muestra fotográfica sobre Faros de Andalucía en la Sala Tallafigo del Centro Cultural de La Victoria en Sanlúcar de Barrameda. La muestra se inaugurará a la nueve de la noche y ya estará abierta hasta el próximo día 20 de julio de lunes a viernes en horarios de 10 de la mañana a 1 de la tarde y de 7 de la tarde a 9,30 de la noche.
La exposición fotográfica Faros de Andalucía está formada aproximadamente por una treintena de fotografías, todas ellas realizadas por miembros de la Asociación de Amigos de los Faros de Andalucía. En ellas podemos ver imágenes tan populares como el Faro de Chipiona pero también las de otras torres tremendamente desconocidas para el público en general como es la del Faro de Castell de Ferro, en la costa granadina. Pero la exposición va más allá ya que la intención de sus organizadores es compartir con quienes acuden a verla parte de las imágenes que han captado en sus visitas a los diferentes faros andaluces; para ello en la exposición se ofrecen imágenes de escaleras, lentes y lámparas de algunos de nuestros faros, cosas normalmente ocultas a los ojos de la población.
En el siglo III A.C. el Faro de Alejandría guiaba a los navegantes de aquella zona del Mediterráneo; hoy en día, 2300 años después, los faros siguen siendo básicamente igual que aquel de la isla que le dio nombre a estos edificios: una torre más o menos alta, cerca de la costa, con una luz en su parte superior que de noche sirve de referencia a los navegantes.
Ha llegado la hora de ponerse la ropa de trabajo y comenzar a abrir un nuevo camino. Es hora de dejar de ser vecino de Xábia en defensa del Faro de San Antonio, vecino de Ribadeo defendiendo el Faro de Isla Pancha o vecino de Barbate defendiendo el Faro de Trafalgar. Ahora toca ser, sencillamente, amigo de los faros; de todos y cada uno de los 187 que alumbran nuestras costas cada noche, porque si un faro se convierte en hotel o restaurante para disfrute de unos pocos, sea donde sea, el faro con su historia y su cultura no lo pierden solamente sus vecinos: lo perdemos todos.
La Asociación de Amigos de Faros de Andalucía ha anunciado que su exposición itinerante de faros llegará a Sevilla el próximo martes 14 de este mes. Según el presidente de la asociación, Francisco García Martínez:Nuestra exposición fotográfica ha dejado los aires marineros de la Bahía y el próximo martes recala en Sevilla, concretamente en el C.R.A.I. Antonio de Ulloa, dependiente de la Universidad de Sevilla, que está en la Avenida Reina Mercedes s/n. Allí la tendremos desde el martes 14 de abril hasta el 5 de mayo con un horario muy amplio: de lunes a sábado de 9:00 a 21:00.
La Asociación de Amigos de los Faros de Andalucía y la Autoridad Portuaria de Sevilla han llegado a un acuerdo para colocar fotos ilustrativas junto a algunos ventanales del Faro de Chipiona.
En concreto las fotos serán colocadas en los dos primeros ventanales dada la amplitud de los mismos y en aquellos en los que el acceso sea cómodo desde la escalera.
Es probable, según las encuestas, que en las próximas elecciones generales Podemos venza y se alce como primera fuerza política de este país desbancando a PP y PSOE aunque, algunas veces, las encuestas, que son un reflejo de lo que la gente dice, se equivocan, porque la gente miente, tal vez porque siente vergüenza de seguir votando a los de siempre después de hacer lo que hacen y no quiere reconocerlo.
De las muchas cosas que en este país no marchan bien hay una que suele estar casi todos los días en los medios de comunicación: la Cultura. Manifestaciones de padres, profesores, maestros y alumnos que claman contra los recortes y reclaman una educación universal, gratuita y de calidad.
Por Francisco García(Presidente de la Asociación de Amigos de Faros de Andalucía)•
Estimado/a Señor/a:
En septiembre de 2012 se creaba en Sevilla la Asociación de Amigos de los Faros de Andalucía. Tal vez la primera impresión sea de sorpresa por crearse en una ciudad que ni siquiera su provincia tiene costa pero, muy posiblemente, este sea uno de los puntos más positivos: de haberse creado en un municipio con puerto y faro probablemente su objetivo sería exclusivamente la defensa de ese faro concreto, pero ya va siendo hora de que los andaluces vayamos a una en la defensa de nuestras cosas, hora de defender lo andaluz y dejarse de fronteras absurdas entre provincias, ciudades o pueblos. No somos Amigos de tal o cual faro, somos Amigos de los Faros de Andalucía, de todos y cada uno de ellos.
Piden que estos edificios tan emblemáticos sean visitables.
Señora Ministra de Fomento:
Ha anunciado usted que Puertos del Estado pondrá en marcha próximamente un plan para dar uso hotelero a los faros que no estén habitados, respetando su valor patrimonial, a través de concesiones al sector privado. Desde la Asociación de Amigos de los Faros de Andalucía creemos que la idea, siendo buena, es ampliamente mejorable. Estas edificaciones pueden aportar a la sociedad española mucho más que hoteles situados en lugares privilegiados: pueden aportar cultura, conocimiento y amor y respeto por un patrimonio tan valioso como desconocido.
Por Francisco García(Presidente de la Asociación de Amigos de Faros de Andalucía)•
Dos de los faros más representativos de Andalucía están de cumpleaños. El 30 de abril de 1.863, hace ya 150 años, se ponía la primera piedra del que, 4 años más tarde, sería el más alto de España: el faro de Chipiona. Las casualidades de la vida, el destino, o tal vez la idea premedita de alguien, hicieron que la fecha elegida para tal acto, 30 de abril de 1.863 coincidiera con otro hito en la historia de los faros andaluces: aquella misma noche comenzó a funcionar el faro de Cabo de Gata.
Hoy dos de los faros más representativos de Andalucía están de cumpleaños. Tal día como hoy de 1.863, hace ya 150 años, se ponía la primera piedra del que, 4 años más tarde, sería el más alto de España: el faro de Chipiona. Las casualidades de la vida, el destino, o tal vez la idea premedita de alguien, hicieron que la fecha elegida para tal acto, 30 de abril de 1.863 coincidiera con otro hito en la historia de los faros andaluces: aquella misma noche comenzó a funcionar el faro de Cabo de Gata.
La de hoy debería ser una fecha llena de actos conmemorativos. El Ayuntamiento de Chipiona y la Autoridad Portuaria de Sevilla, responsables del faro, lo están haciendo y dando, de paso, un ejemplo de defensa de la cultura, de la historia y del patrimonio andaluz: placa en honor de Jaime Font, exposiciones, visitas guiadas gratuitas al faro, conferencias (el próximo jueves día 2 ofrecida por el propio farero, Septimio Andrés, todo un lujo) y en Almería se ha editado un magnífico libro titulado Lo demás es oscuridad que conmemora esos 150 años de funcionamiento de los primeros faros de la provincia (el último día del año lo hará el de Mesa Roldán) y en el que hemos colaborado más de 180 personas enamoradas de los faros.
Sevilla, 5 de diciembre de 2012.
Hace unos días se ha creado en Sevilla la Asociación de Amigos de los Faros de Andalucía. A primera vista puede resultar original y llamativo que una asociación que tiene entre sus principales objetivos la defensa del patrimonio histórico, social y arquitectónico que significa el conjunto de los faros andaluces nazca en la capital de una de las 3 únicas provincias de nuestra comunidad que no tienen costa. Pero Sevilla, a pesar de no tener mar, está y se siente cerca de él. Tiene puerto, tiene Autoridad Portuaria, tiene uno de los pocos museos existentes en España donde se exponen señales de ayuda a la navegación y donde podemos ver maquetas de faros españoles, lentes de Fresnel, lámparas de incandescencia por vapor de petróleo a presión, luces de acetileno con intermitencia automática que alumbraron nuestras costas durante buena parte del siglo XX y algo que ya quisiera lucir en alguna sala cualquiera de los grandes puertos del país: la antigua lámpara de arco voltaico de Cabo Vilán, primera señal luminosa eléctrica que se instaló en un faro español. Y de la Autoridad Portuaria de Sevilla dependen el faro de Bonanza, en la marinera Sanlúcar de Barrameda y el faro más alto de España y de la Península Ibérica: Chipiona. Tal vez ahora no resulte tan extraño que la primera Asociación de Amigos de los Faros española haya nacido en Sevilla.