Cartas al director
El Gobierno quiere sacrificar al juez Tirado Márquez para omitir responsabilidades del mal funcionamiento de la Justicia
Aquella noche bebimos una cervecita más de la cuenta. Tras saltarnos un semáforo, la Policía Nacional nos mandó parar y, tras breves segundos con nuestro DNI en su poder, sabían que ninguno de nosotros teníamos antecedentes. Las multas por las copas y el semáforo, eso sí, tuvimos que pagarlas.Este procedimiento tan sencillo es una utopía en los pasillos de los juzgados de la Justicia española. En una sala se está procediendo a la vista que, incomprensiblemente, el juez de la sala de al lado desconoce por completo. Para saberlo, debe valerse de la intuición; y, si acaso, encargar al funcionario correspondiente que acuda a la sala de al lado por la información.