
La altas temperaturas del verano en Sevilla hace que se agudice el ingenio de los comerciantes y el gobierno municipal para buscar opciones para dotar de sombre a los espacios públicos y hacerlos más habitables. La mejor sombra es la sombra vegetal, la sombra que dan los árboles. Los toldos son tejidos porosos (30-50%) que permiten el paso del aire pero dificultan su ascenso y salida. El aire caliente asciende, al tener menos peso que el aire frío y choca con los toldos, quedándose concentrado bajo los toldos.

